jueves, 15 de octubre de 2009

Touchée

Supongo que nunca se termina de aprender que no hay material suficientemente duro capaz de igualar el desgarro de una sola palabra... o de su ausencia... y que los efectos generados jamás se podrán comparar con ningún otro daño... porque hay algo dentro de noostros vulnerable, susceptible y débil que nos hiere con una huella, mala suerte, indeleble demasiadas veces...

Veo: los días pasar
Sabe: a regaliz rojo
Huele: a cosas que me enfurecen... o me derriten a fuego lento...
Toco: la lengua con la punta de los dedos... hummmm... veneno...